El Pleno del Congreso de Nuevo León revivió sus labores tras un periodo de parálisis que se extendió por cinco sesiones, con tan solo 22 legisladores presentes en la sesión de este martes.
Entre debates sobre la baja asistencia y solicitudes de suspensión, se llevó a cabo un acto protocolario crucial: la toma de protesta de José Alfredo Pérez Bernal, suplente de Waldo Fernández, quien ahora forma parte de Movimiento Ciudadano.
La apertura del tablero de asistencia, realizada por más de una hora, reveló que solo los diputados del PRI y PAN figuraban entre los presentes, mientras se daba lectura a dictámenes y se turnaban asuntos a las comisiones legislativas. Destacó la solicitud de refinanciamiento de Agua y Drenaje de Monterrey.
El priista Javier Caballero, de la Comisión de Gobernación, propuso la toma de protesta de José Alfredo Pérez Bernal, argumentando un mandato del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Pérez Bernal, en su primera declaración como legislador, señaló la necesidad de acatar el fallo para evitar posibles consecuencias legales.
La sesión estuvo marcada por la solicitud de suspensión por parte del coordinador del PAN, Carlos de la Fuente, debido a la falta de asistencia y la imposibilidad de someter a votación diversas reformas. Sin embargo, la petición de permanecer en los trabajos para tomarle protesta a Rosaura Guerra, realizada por Sandra Pámanes de Movimiento Ciudadano, no fue considerada por la presidencia de la Mesa Directiva.
La reanudación de actividades en el Congreso de Nuevo León sigue siendo un desafío ante los conflictos entre las bancadas, que han dejado un rezago legislativo de más de 2 mil expedientes y una serie de sesiones perdidas que han afectado la operatividad del recinto legislativo.
